Una anciana de 83 años de edad consiguió liberar su mano de las fauces de un dragón de Komodo gracias a una certera patada.
Haisah estaba en la entrada de su casa mientras tallaba un palo de escoba en la isla Rinca, cuando de repente uno de estos animales surgió de la nada y le mordió su mano fuertemente.
“De repente me atrapó la mano derecha con sus fauces”, “Tenía un cuchillo en la mano, pero lo solté cuando me mordió. No había nadie cerca y sabía que tenía que luchar para sobrevivir”.
“Entonces le di una patada en una pata con todas mis fuerzas, sólo era una patada, pero me soltó la mano”, “Ahora estoy bien”.
Recibió 35 puntos de sutura en la herida de su mano, y espera recuperar pronto la movilidad para poder seguir fabricando escobas.
Fuente: NosabesNada.com
0 comentarios :
Publicar un comentario
Favor de ser discreto al momento de realizar su comentario!