Un robot ayuda al desarrollo de niños autistas

Cuando se descubre que un niño se encuentra dentro del espectro autista, es fundamental trabajar con él y estimularlo desde la edad más temprana posible. Pero la mayoría de las veces esto no resulta una tarea fácil, debido que muchos autistas rechazan los rostros que les resultan desconocidos o se ven imposibilitados de decodificar ciertos índices gestuales, lo cual puede desembocar en un retraso grave en el desarrollo de sus habilidades comunicativas.

En sus esfuerzos por evitar –en cierta medida- que esto suceda, investigadores de la Universidad de Vanderbilt descubrieron, luego de realizar varias experiencias, que los niños -autistas o no- le pueden prestar mayor atención a un terapeuta robot que a uno humano. Por esta razón fue que decidieron comenzar a trabajar con Nao, un organismo autónomo, programable y de mediana estatura, creado por la empresa francesa Aldebaran Robotics.

Así fue que se dotó al simpático humanoide con la capacidad de alentar a los pequeños para que puedan imitar gestos y seguir instrucciones sencillas, así como también de felicitarlos cuando logran responder correctamente, llamándolos por su nombre y animándolos para que sigan mejorando.

Gracias a que los investigadores lograron programarlo con el mismo tipo de gestos y estímulos verbales que los terapeutas de carne y hueso usan, el robot puede intervenir positivamente en el desempeño de las técnicas de atención conjunta en los niños con autismo, la cual es fundamental en su progreso personal, ya que los ayuda a manejar lenguajes no verbales fundamentales a la hora de comprender los mensajes que les son transmitidos.

Un punto fundamental es que, a través de un sistema de cámaras, sensores y computadoras, el robot puede adaptar su trabajo en función de la respuesta que cada niño logra darle. Esto es de suma relevancia, debido a que cada caso es único y con requerimientos específicos.

Claro que los investigadores no están sugiriendo que su robot reemplace a los terapeutas humanos, pero sí que su inclusión dentro de los tratamientos podría ser una herramienta muy valiosa.

¿Qué te parece este desarrollo?

Fuente: Tu Discovery

Posted in: Ciencia , Salud